La mayor parte de mis clientes de Coaching ejecutivo tienen problemas en sus trabajos. En algunos casos, son problemas que tienen que ver con su propia personalidad. Y podemos trabajarlos sin problema mediante un buen proceso. En cambio, algunos clientes me manifiestan su deseo de abandonar su empleo actual porque está afectando a su salud mental. ¿Cómo saber si ha llegado el momento de despedirse o llegar a un acuerdo con la empresa para dejar tu trabajo allí?
Los problemas en el trabajo son sin duda una de las principales causas de estrés en España. Muchos de mis clientes me reconocen graves problemas de comunicación con sus jefes o con sus equipos. Estos síntomas lo que sin duda dificultan son la gestión del estrés. La ausencia total de una productividad efectiva, el exceso de control, o las prácticas abusivas de determinados jefes o compañías hacen que a veces tengamos que tomar una decisión que puede afectarnos no sólo en lo personal sino también en lo profesional. ¿cuándo y cómo saber si debes dejar tu empleo?
Pasamos mucho tiempo trabajando. De hecho, si pudiéramos hacer un ranking de dónde invertimos nuestro tiempo en nuestras vidas, después de dormir el trabajo es nuestra segunda inversión. Por eso, y dado que en principio durmiendo no podemos trabajar en nuestra salud mental ¿qué pasa cuando el trabajo se hace insoportable y afecta también al poco tiempo que tenemos en disfrutar con nuestros seres queridos?
La semana de 4 días que está en boca de numerosos gurús no resolvería algunos de los casos de estrés laboral al que llegan algunos trabajadores en España
Y es que a veces ni siquiera reducir el tiempo que estamos trabajando ayudaría a eliminar por completo el estrés que determinadas empresas o jefaturas nos producen. A veces llegan a nuestro proceso de coaching con el objetivo de ayudarles a saber que están tomando la decisión adecuada. ¿Cuáles son los síntomas que determinan que una relación laboral está abocada a un fracaso de forma inmediata?
Fundamentalmente lo que realizamos es mirar hacia el pasado de nuestro cliente en ese mismo entorno laboral y ver si existen situaciones en las cuales se pudo facilitar feedback a la compañía. Si a pesar de eso la compañía no ha hecho nada o lo que ha hecho no ha sido más que un parche para el verdadero problema, es quizás el momento adecuado para dar un paso adelante y romper nuestra relación laboral. Muchas de las veces esperamos un cambio que nunca viene. En parte porque no hemos comunicado las necesidades reales que tenemos o la situación de fatiga a la que hemos llegado. ¿lo hemos hecho y no ha pasado nada? Pues entonces tenemos algo que resolver.
Otra de las razones que pueden provocar una ruptura «unilateral» en nuestro contrato laboral es el denominado estrés crónico. Es decir, no es un momento puntual, no es un proyecto concreto. Llevamos ya meses, a veces incluso años con dificultades para conciliar el sueño, falta de concentración, cambios temperamentales , irascibilidad permanente, impulsividad ( a veces con trastornos alimenticios) … todos ellos son síntomas claros de burnout laboral y requieren de medidas inmediatas antes de problemas mayores.
Finalmente, y aquí viene la prueba del algodón definitiva. ¡Te cuesta levantarte de la cama cada mañana! ¿sientes que el trabajo se ha convertido en tu peor pesadilla incluso después de haber descansado. Tienes dificultades para llegar con ánimo. Y sólo cruzar la puerta de la oficina acelera tu pesadumbre y tu hiperventilación. Y sobre todo , llevas tiempo arrastrando una sensación mezclada de agobio, ira y tristeza . Esto pasa cada vez que tienes que hablar de tu actual etapa profesional. Piensa que ha llegado el momento de tirar la toalla. Y dejar de sufrir. No te haces la idea la cantidad de clientes que por el mero hecho de cambiar de trabajo cambia por completo su vida personal y su estado de ánimo.
Y si todavía tienes duda sobre cómo saber si debes dejar tu empleo estaría encantado de tener unas sesiones de coaching en Madrid con las que acompañarte y hacerte ver aquello que eres incapaz de ver ahora mismo. ¡siempre hay una salida para casi todo! ¡ y a veces es la única que puedes escoger !