Estamos viviendo unas semanas de infarto. Estar conectados a cualquier medio de comunicación o red social en pleno siglo XXI supone inexorablemente sufrir por la cantidad de eventos negativos que se suceden día tras día. Desconectar de las noticias que llegan desde Ucrania y del resto del mundo es prácticamente imposible si vivimos en un mundo civilizado. Entonces ¿cómo podemos frenar el estrés que nos produce tanta desgracia ajena? Hoy te doy unos trucos útiles para sobrellevarlo lo mejor posible.
En estos días de guerra, invasión y muerte es imposible desconectar. Al menos a mi me entra un cargo de conciencia terrible el no saber qué pasa a pocos kilómetros de aquí, donde millones de personas sufren al dejar sus hogares o incluso sus vidas. La situación en Ucrania recuerda a los comienzos del Covid, donde las malas noticias generaban además de miedo una situación de estrés insostenible.
Ante estas situaciones lo mejor es ser consciente del origen de esa tensión en nuestra mente y nuestro cuerpo y comenzar desde ya algunas de las medidas que te propongo para frenar el estrés con origen en noticias terribles.
Cómo lograr reducir el estrés causado por la exposición a noticias negativas
- Practica el descanso necesario.
El descanso no solo implica descansar . Y si dormimos poco , el cansancio puede producir una mayor ansiedad y estrés ante estímulos externos negativos. Si no duermes lo suficiente, tu cuerpo verás las noticias como una amenaza y eso indudablemente provoca estrés. Tras siete u ocho horas de sueño el cuerpo tiene una mayor preparación emocional para aquello que pueda venir.
- Date premios cada día , seguro que haces cosas por las que debes hacerlo
Mientras cuidas tu cuerpo y tu mente no estarás expuesto/a a los impactos mediáticos y reforzarás tu carga emocional. No siempre es hacer deporte agotador. Puedes ir de compras ( aunque no compres ). O darte un relajante baño. O pasear, o probar a cocinar ese plato de pescado al horno que tanto te gusta. Irse de cañas con amigos o pintar un cuadro o escribir un libro. Todo vale para liberar mente y cuerpo.
- Como bien e hidrátate con frecuencia.
De nuevo hablamos del bienestar físico completo para alcanzar el bienestar mental (al revés de mens sana in corpore sano) . Una buena alimentación , equilibrada, donde se vaya de más a menos conforme va pasando el día y repartiendo las comidas en 5 tomas, ayuda a tener una mente más sana. Igualmente una hidratación constante mediante agua ( puede ser con gas o mezclada con limón ) ayuda a realizar mejores digestiones y a tener toda la maquinaria anti estrés en perfecto estado de batalla.
- No hace falta que te expongas a decenas de fuentes de información
Elige aquella fuente que te inspire más confianza y que sepas que no está aportando ninguna dosis adicional de tensión emocional innecesaria. Esto es prácticamente imposible en los tiempos que corren porque los medios de comunicación tienden a enfatizar o exagerar emocionalmente las noticias para provocar dependencia de los espectadores. No debes entrar en pánico ni en un ciclo frenético de tristeza y angustia que muchos medios promueven.
- Busca a alguien que te cuente las noticias sin dramatizar, con realismo
Estoy seguro que conoces a alguien que es capaz de tranquilizar hasta al político más irascible… pues esa es la persona que tienes que llamar para que te haga un resumen de lo que está pasando en el mundo. Yo en la agenda los tengo señalados con corazón verde, son personas capaces de contarme la verdad sin necesidad de echar más leña al fuego… que ya están las cosas suficientemente mal.
- Pon un límite a la exposición a los medios
Establece el tiempo suficiente para estar al día de lo que ocurre pero no inviertas ni un segundo más. Pásate a cualquiera de las plataformas de series «cerebro plano, como yo las llamo». Y duerme con tranquilidad y sin agobios. Dependiendo de tus biorritmos, elige la mañana , la tarde o la noche para exponerte a los malos tiempos que está viviendo el mundo, y el resto del tiempo intenta cuidarte.
- Desconecta por unas horas que a la vuelta nada se habrá resuelto con tu ausencia
Siento ser tan poco halagüeño, pero mi experiencia me dice que cuando desconecto por un tiempo determinado (puede ser una mañana entera pero también un fin de semana completo) , no pasa nada. Ni somos imprescindibles ni el mundo depende de nosotros para seguir en sus batallas diarias. Es triste, pero es verdad.