Me vienen clientes a sesiones de coaching ya muy quemados, agotados, exhaustos. Y el tema es que no conocen muy bien el origen de ese cansancio extremo. Investigamos, curioseamos en su vida laboral. Y coincide en muchos casos: las empresas permiten una toxicidad cuando nadie se da cuenta de lo que pasa y la gente va quemándose por el camino. Hoy te contamos qué debes comprobar para saber si la empresa para la que trabajas es tóxica o no.
Tóxica. Qué palabra tan fea. Pero cuanto contenido negativo podemos encontrar dentro de una palabra así. La vida nos hace encontrarnos de vez en cuando con personas tóxicas.. pero ¿qué pasa cuando no sólo las personas son tóxicas sino que el sistema en si está perverso y es tóxico también? ¿cómo podemos saber si la empresa para la que trabajamos es tóxica o al menos acepta el ambiente tóxico como compañero profesional?
Ambiente tóxico. Enfados permanentes. Malas caras. Nadie tiene tiempo de hablar con nadie. Autoridad militar. Gritos, insultos, oyes a alguien llorar en la cabina del baño. Susurros al otro lado de la sala porque nadie se atreve a expresar su miedo. Pasamos gran parte de nuestras vidas en entornos laborales. Por eso es fundamental asegurarse que el ambiente donde invertimos nuestro tiempo sea lo más saludable y positivo posible. Y contribuya a que nuestra felicidad crezca, no a que disminuya. Algunas empresas tienen ambientes tóxicos propiciados desde la propiedad y también desde el comité de dirección.
Síntomas para detectar que la empresa para la que trabajas es tóxica.
- Falta de comunicación efectiva y empática
Hoy en día la comunicación es más importante que nunca. Si hay algo en lo que nos enfocamos en nuestros cursos de comunicación efectiva no es en el volumen de la comunicación sino más bien en la calidad de dicha información. A veces recibimos mails aterradores. Otras veces nos limitamos a ver cómo la información solo aparece en corrillos para determinadas personas de la empresa. Te sientes excluido. La falta de comunicación además de generar ansiedad y estrés provoca confusión y muchos malentendidos que crecen como madejas. En estos casos siempre recomiendo poner en conocimiento de superiores la falta de comunicación de manera respetuosa. A la hora de tener conversaciones difíciles, siempre podemos hablar desde lo que nosotros sentimos cuando recibimos esas comunicaciones o la ausencia de las mismas…
- Liderazgo tóxico. Equipo de dirección tóxico.
Envenenamiento permanente. Así lo calificaría yo. Hacia arriba, hacia abajo, pero también hacia los lados. Son muchos los procesos de coaching ejecutivo en los que acompaño a clientes que están sufriendo jefes tóxicos o cuanto menos poco respetuosos con sus colaboradores. El autoritarismo exagerado, la manipulación de la información ( dependiendo de a quien va dirigida) o los abusos de autoridad son claros síntomas de líderes muy peligrosos para las organizaciones. La sensación de miedo e inseguridad que estos líderes provocan en sus equipos es constante. En este caso lo ideal es ponerse serio y hablar directamente con ellos. Lamentablemente estos casos son complicados y si la situación se mantiene en el puesto es mejor buscar otro entorno laboral ( en otro departamento si se puede o en otro trabajo)
- Cultura de trabajo poco saludable.
Todo es para ayer. No hay procesos definidos, para cada persona aplican un proceso y unos tiempos diferentes. La rumorología es el medio habitual de conversación en la empresa. No te enteras de nada si no te alías con «los que saben» que son «los beneficiados» de la dirección. Todo el mundo hace horas extras. Los reconocimientos de proyectos exitosos son selectivos y siempre recaen en los mismos. Silencio sepulcral que se rompe por una conversación telefónica llena de gritos e insultos. Mal rollo generalizado.
- Falta de oportunidades de crecimiento y desarrollo profesional.
Nadie se preocupa por tu futuro. Ni por tu formación. ni por tu estado emocional. Si ese es tu caso, es muy posible que te encuentres en una empresa tóxica donde sólo se permite que unos pocos crezcan , se formen y pertenezcan a una élite reducida de personas exitosas. El resto son solo subordinados, curritos explotados que no tienen futuro y que exprimen hasta que no pueden más y dimiten o se van a otra compañía ( o se dan de baja por depresión en casos extremos).
Sé que no es fácil. Pero desde mi experiencia te recomiendo 3 acciones paralelas que pueden ayudar a sobrellevar esa situación o a tomar decisiones más o menos drásticas que te ayuden a salir de ese ambiente tóxico. Lo primero es poner consciencia, es decir poner en común con otros ( que pueden ser pares o jefes) , si ellos sienten la misma presión y ambiente tóxico que tu. Lo segundo es cuidar al máximo tu salud física y mental ( hacer deporte, practicar meditación) . Y por último , busca una solución. Se que no es fácil, pero ese trabajo puede acabar con tu vida profesional y también con la personal. Intenta negociar con ellos, pero huye. No siempre se puede esperar «eternamente» porque a veces las cosas se solucionan cuando ya es demasiado tarde. Nos hemos quemado del todo. Y no podemos trabajar ni allí ni en ningún sitio más….
Intenta huir de trabajar en automático. Siente lo que está pasando. No mires hacia otro lado, se consciente de lo que ocurre desde el primer segundo. Y si sólo es un problema tuyo o no concierne a toda la empresa , estaré encantado de poderte ayudar.